Poesía | “Gratitud”, un texto de José Luis García

Estatua de ángel angelical con fondo negro.


Detrás de la ventana cae la lluvia.
Los días pasan fugaces como gotas de agua,
iguales e idénticas, con el mismo fin,
con la natural percepción de ahogarse y confundirse
en la misma materia de la que fueron engendrados:
la nada.
Pero sucede que un ángel llega sin que nadie lo perciba,
sin que nadie, irremediablemente,
caiga en la cuenta de que los días
empiezan a tomar un rumbo sorprendente,
que nadie conoce.
Quizá, un día, alguien sospeche
que esa persona
—o ese ángel fieramente humano—
viene de la región de la luz,
que su presencia ahuyenta a las sombras
y que nada a su alrededor
reconoce la sentencia del olvido.
Sin embargo, en un fatal descuido, sus alas
quedan al descubierto,
y pese a que callas para no quebrantar su secreto,
no logras borrar de tu retina
ese fugaz descubrimiento.

Todo cambia a tu alrededor,
todo adquiere un tono épico,
como si la leyenda tomase forma
bajo la niebla de los deseos.

Y el ángel no ignora que tú afrontas el reto,
que estás decidido a cambiar el rumbo de tus días,
que la vida es la eterna caza del futuro
y que sólo el guerrero encuentra paz en la lucha.

Pero lo inevitable debe suceder. Es ley de vida.
Así como llega un ángel marchará
cuando la nieve oculte el camino
y nada le retenga.
Es duro aceptarlo. Pero estás preparado
para sobrevivir a esa ausencia.
Ignoras si llorarás o sonreirás cuando se despida.
Sabes, con absoluta certeza, que es un ángel
y que sólo tendrás un verso de gratitud
cuando se vaya.

Poema del libro El ángel en la penumbra (Ediciones Deslinde, Madrid, 2021)